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Te sientas a mi lado en el sofá, enciendes un cigarrillo. Me gusta mirarte, tocarte con mis deditos la nuca mientras fumas. Estás concentrado con el humo que sube, me miras, me sonríes. Me besas. Lo salvamos a tiempo. Lo sabemos. Y casi no me acordaba de las noches en vela y de los cigarros compartidos. Y como me gusta que me agarres el culo cuando te estoy abrazando o que me beses la nuca cuando estoy haciendo la cena. O que me des un toquecito en la punta de la nariz cuando tomamos el cafe por la mañana. Y que hables y te enfades con lo que sea, con Zapatero o con la política agraria de Alemania, y tener que callarte con un beso. O que cuando llegas del trabajo te me metas en la ducha y me asustes. Ver como te levantas de la cama y me ves, te lo repiensas y ya vuelves a estar dentro "cinco minutos nada más...".